Ayer pensaba en cuanta gente salía sin más de todo esto. Y me da miedo, a veces me da miedo, casarme y tener hijos. Una casa con jardín y un cocker. Llegar a casa y sentarme a ver la televisión, abrazada a mi marido... Los domingos barbacoa y Lambrusco. Tener un trabajo con un sueldo aceptable, haver la pelota e ir de vacaciones a Mallorca...
Tengo miedo a ser normal sin más, nacer un día, tener una infancia feliz, con padre, madre y hermanas... Buena gente... Gente corriente... Tengo miedo a pasear por Las Ramblas sin más, sin nadie con quien tropezarme...
Pero miedo más que nada a envejecer y haber hecho volar el tiempo, tan rápido y porque si...
Me gustaría haber pisado una cárcel, aunque fuera por robar una barra de pan y pasar un par de días; me gustaría ir a la India a dar de comer a niños pobres, vestirlos de colores y salir a jugar, me gustaría hacer una maratón larguísima en qualquier parte del mundo; estar en un concierto de los que hacen história y que nos tengan que echar a patadas por que queremos más; me gustaría luchar por las mujeres maltratadas y montar una asociación donde acojerlas; me gustaría viajar a Brasil y perderme en los barrios más peligrosos; tener un amante famoso y poder reírme de los chismes que cuantan en las revistas sobre él...
Ser feliz de otro modo, uno más divertido. No quiero que los niños tengan que estudiarme en la escuela pero quiero formar una pequeña parte de ella, quiero que un día alguien diga:
"Ah! Pues ella también estaba allí..."
No sólo entrar, pasar y salir... Quiero bailar un poco antes de irme.
Julieta.
